Ayer salió del aire “Pasión y Poder”, una telenovela que después del horror de “Lo imperdonable” no llegó a nuestras expectativas en lo absoluto. Repito, es simplemente imposible e incongruente por decir lo menos que haya ganado como mejor producción en los “Premios TVyNovelas” de este año.
Lo bueno: “Regina” y “David” quedaron juntos y se comprometen para casarse. De lo poco bueno de esta telenovela.
El arrepentimiento de “Nina”, aunque apresurando un poco mal planteado su cambio, tiene un poco más de sentido que “la transformación heroica” de “Eladio”. La muerte de un hijo puede cambiar para bien a la peor de las personas.
Lo malo y lo feo: Todo lo demás de esta historia y de “gran final” de telenovela
No sé ni por dónde empezar. No lo haré en orden cronológico. Lo haré por lo que más nos molestó de este truculento final.
La muerte de “Arturo”. El personaje no merecía un final así. Es imposible que después de que llevamos media novela, pensando que “Julia” ama a “Arturo” los escritores nos salgan con que siempre no porque un actor no pudo con el paquete de ser el villano de la historia. (En ese momento no sé qué fuerza mayor me detuvo para no cambiarle de canal).
“Julia y Eladio” se recuentan después de viajar por el mundo, quedan juntos y se prometen perdonarse y empezar de nuevo con anillito y todo. Con ese desenlace triunfaron dos cosas: la misoginia y la soberbia.
Con unas terapias milagrosas, “Julia” perdonó a “Eladio” y todo mundo tan contento. Tu marido te maltrata verbal y físicamente por 25 años y no solo lo perdonas pero regresas con él. ¿En serio?
Es como si “María Dolores” hubiera regresado con “Daniel” en “Yo no creo en los hombres” o “Fatmagul” con “Mustafá” en “Qué culpa tiene Fatmagul”.
Qué falta de respeto al género femenino y a la inteligencia del público. Todavía no lo puedo creer.
La cereza del pastel
“Julia” mete a su malvado padre en un asilo. Por más malo que sea, eso que tiene de justo y de bueno. Qué clase de valores o falta de valores se están mostrando en la ficción.
“Franco” mata de disparos en el estómago a “Arturo” al verse acorralado y termina en la cárcel. Abusan de él.
El niño” “Erick” también termina en la cárcel. Lo torturan y le cortan dedos de la mano. Después lo vemos arrepentido y pidiéndole perdón a medio mundo.
No solo es poco original, el desenlace de las ovejas negras de cada familia. ¿Su castigo tenía que ser tan violento y tan crudo en horario “prime”?
Simplemente terrible…
Para finalizar
Si esta fue la supuesta “Mejor Telenovela” del año en Televisa las cosas en la televisora de San Ángel andan muy mal.
¿Cómo es que se llegó a esto?
Lejos quedaron las épocas en donde Televisa sublevó a países enteros con historias como “Cuna de lobos”, “Los ricos también lloran” y “Corazón salvaje” por mencionar algunas telenovelas de éxito y clásicas.
De unos años a la fecha, ¿qué ha pasado? Salvo algunas excepciones, su barra de telenovelas no es lo que alguna vez fue. No logra atrapar al público.
Por lo pronto, el siempre controversial productor Salvador Mejía ya fue destituido como Director de Telenovelas en Televisa, pero esa no es una solución contundente ni a largo plazo.
“La fábrica de sueños” que alguna vez fuera nuestra televisora favorita debe de ir con los tiempos, tener humildad, reencontrarse y reestructurar a fondo.
Si no, quizás su futuro no vaya a ser muy feliz.
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