En 2021, Ángel Javier Aviles Monzón, mejor conocido como YOVNGCHIMI, se presentó al mundo con el lanzamiento de su tema ‘Glizzy Walk’. Lejos de pasar desapercibido, el sencillo se convirtió en todo un éxito, y rápidamente tuvo su continuación en ‘Glizzy Walk 2.0’. A partir de aquí, su carrera despegaría y nunca más tocaría el suelo.
En tan solo un par de años, el puertorriqueño conquistó la escena urbana y llevó la movida del drill, un subgénero del trap, a un nuevo nivel. Sus primeras composiciones, además de haber escalado en los listados de éxitos latinos, también llamó la atención de grandes de la industria actual como Eladio Carrión, con quien dio vida a ‘Glizzy Walk 2.5’, y de Bad Bunny, colaborando con su connacional en el tema ‘MERCEDES CAROTA’.
A finales de 2023, el rapero lanzó su álbum debut WLGS dando continuidad a su trabajo de mixtapes, Gangsta Grillz: Mvrda Gvng. Fusionando elementos del reggaetón con el drill, Whole Lotta Gvng Shit es un recuento del pasado del puertorriqueño, cantándole a la vida y a sus experiencias. A lo largo de 16 pistas, el disco presenta colaboraciones con artistas como Ozuna, French Montana, Bryant Myers, entre otros, resaltando su amor tanto por sus raíces como por el rap norteamericano. Un álbum que con sus más de 100 millones de streams y en sus propias palabras, “la está rompiendo”.
Pero para el rapero la música no fue siempre su primera opción. En años más jóvenes, YOVNGCHIMI destacaba por su gran habilidad en el baloncesto, lo que se tradujo en varias oportunidades académicas y los inicios de sus estudios universitarios. Pero este estilo de vida no se ajustaba a lo que el rapero se hubiera imaginado y, aprovechando su estancia en Estados Unidos, el cantante se dejó llevar por el negocio de la música.
En 2018, el cantante llegó a un estudio de grabación por primera vez. Entonces, la música era solo un pasatiempo, a pesar de que YOVNGCHIMI ya había empezado a componer y a grabar con productores. “Se lo debo a DaiV”, el cantante puertorriqueño que impulsó al rapero a dar sus primeros pasos en la música. “Siempre me han inspirado los míos y las personas que me han acompañado desde el comienzo”.
Fiel a su palabra, YOVNGCHIMI creó lo que se conoce como el Glizzy Gvng, un grupo de raperos que no solo lo han apoyado en su trayectoria, sino con quienes busca crear toda una nueva generación de artistas del grill. “Estoy en el proceso de convertirlo en una disquera, y tengo artistas debajo de ella firmados. Tengo a CDOBLETA, Slayter, Pressure 9×19, y otros raperos que la están rompiendo en Puerto Rico”, explica. “Yo mantengo mi círculo bien cerrado. Quiero que todos crezcamos y protejamos nuestro movimiento”.
Esta propuesta viene influenciada por su experiencia en la industria norteamericana, donde muy a menudo se crean comunidades de artistas comprometidos a elevarse mutuamente. “Desde el comienzo quería hacer un corillo”, explica sobre su visión que trasciende el éxito individual, sino que abraza la idea de la colaboración entre artistas. “Si tengo la oportunidad de darle la mano a cualquiera de los míos, a cualquiera que yo crea que tenga talento, se la voy a dar”.
La capacidad de YOVNGCHIMI para tejer rimas con una fluidez casi inconsciente se destaca como uno de sus atributos más distintivos. Sus habilidades en el micrófono, que parecen surgir de forma espontánea como si estuviera improvisando un freestyle perpetuo, son evidentes en el éxito de cada uno de sus temas. WLGS está lleno de historias personales, algo en lo que el puertorriqueño siempre ha intentado hacer hincapié: “lo que canto, la vida de calle, es real”.
De hecho, su apuesta por el drill no es una coincidencia. El puertorriqueño evolucionó con el género, al mismo tiempo que era espectador del complejo entorno del barrio Santurce, donde creció, en San Juan. “El drill se ha convertido en un género, que sigue al trap, pero que es tan grande que dejó de ser subgénero”, explica. “Mucho de lo que canto es sobre mi vida”.
En los últimos años, coincidiendo con el ascenso de su carrera, YOVNGCHIMI se enfrentó a problemas legales en los cuales prefiere no ahondar. A pesar de que sus intentos por llevar su música fuera de Puerto Rico se vieron estancados por su imposibilidad de salir del país, el rapero nunca se ha detenido. “Tuve que cancelar una gira que estaba completamente vendida. Uno nunca sabe porque el destino es raro. Sabrá Dios cómo hubieran funcionado las cosas si no pasaban así”, reflexiona.
Pero esto no fue impedimento para labrar su camino a pesar de que sus opciones estuvieron limitadas. Conquistando los escenarios de su país, de cara al futuro, YOVNGCHIMI está listo para llevar su show más allá de las fronteras del archipiélago. “Tengo otros proyectos nuevos, tengo colaboraciones nuevas, tengo un nuevo season de YOVNGCHIMI que está cabrón, está duro. Y eso es lo próximo”.
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